Dalian, 29 jun (Xinhua) — A pesar de que el mundo enfrenta una desaceleración del crecimiento económico y una recuperación desafiante, la economía de China ha mantenido un desarrollo constante, impulsada por el surgimiento de nuevas industrias y nuevos motores de crecimiento.
Durante la 15ª Reunión Anual de los Nuevos Campeones, también conocida como Davos de Verano de 2024, que concluyó el jueves, los participantes elogiaron los esfuerzos de China por cultivar nuevas fuerzas productivas de calidad y señalaron que no solo ha inyectado nueva vitalidad a la economía china sino que también ha expandido oportunidades para la cooperación global.
En la ceremonia inaugural, el presidente polaco, Andrzej Duda, dijo que la contribución de China al crecimiento económico mundial se ha mantenido alrededor del 30 por ciento a lo largo de los años y continúa siendo una fuerza impulsora clave para el crecimiento económico mundial.
Nuevos impulsores del crecimiento
Desde principios de este año, la economía china ha mantenido su ritmo de recuperación. Comenzó con fuerza en el primer trimestre con un crecimiento interanual del 5,3 por ciento y continuó creciendo de manera sostenida en el segundo trimestre.
Los datos oficiales mostraron que los indicadores que miden el consumo, el comercio de bienes y la producción industrial de valor agregado registraron un desempeño positivo en mayo.
«Tenemos la confianza y la capacidad para alcanzar el objetivo de crecimiento de alrededor del 5 por ciento para este año», dijo el primer ministro chino, Li Qiang, en su discurso en la sesión plenaria de apertura del evento.
Las organizaciones e instituciones internacionales han elevado sus previsiones para el crecimiento económico de China, lo que refleja una fuerte confianza en las perspectivas futuras del país.
Recientemente, el Banco Mundial aumentó su pronóstico de crecimiento económico de China para 2024 al 4,8%, 0,3 puntos porcentuales más que el pronóstico anterior. El Fondo Monetario Internacional (FMI) también revisó las perspectivas económicas de China al 5%, 0,4 puntos porcentuales más que el pronóstico anterior.
Esta perspectiva positiva contradice las afirmaciones de algunos políticos y medios de comunicación occidentales, que afirmaban que la desaceleración económica de China podría plantear riesgos para el crecimiento económico mundial. Según el análisis del FMI, un aumento de 1 punto porcentual en el crecimiento del PIB de China se traduce en un aumento promedio de 0,3 puntos porcentuales en el crecimiento de otras economías.
La economía de China ha superado las expectativas y ha mostrado una fuerte resiliencia en la primera mitad de este año, especialmente en las industrias emergentes, dijo a Xinhua Jason Ding, socio gerente de las oficinas de la Gran China de Bain & Company.
En particular, China ha adquirido una ventaja internacional en materia de vehículos eléctricos, baterías de litio y energía fotovoltaica. La energía renovable representa hoy más del 50 por ciento de la capacidad instalada total del país.
«Veo enormes oportunidades en China, ya que es líder en una serie de nuevas tecnologías, como las baterías y los vehículos de nueva energía, que han proporcionado nuevos motores de crecimiento», dijo Merik Dusek, director general del Foro Económico Mundial.
«El crecimiento de alta calidad» es más que una expresión popular, dijo Peng Sen, presidente de la Sociedad China de Reforma Económica. «Se trata de una productividad avanzada y de innovación».
El crecimiento futuro de las industrias de China requiere una transformación revolucionaria en el frente tecnológico, así como un enfoque en tecnologías de vanguardia como la IA generativa y los chips avanzados, agregó.
Abriendo el esfuerzo
En medio de un panorama económico mundial sombrío, el crecimiento económico sostenido de China promete efectos indirectos positivos para el resto del mundo.
En la actualidad, China es un importante socio comercial de más de 140 países y regiones. En los primeros cinco meses de este año, su comercio de bienes con otros países creció un 6,3 por ciento interanual, según las estadísticas oficiales.
China tiene un vasto mercado de más de 1.400 millones de personas, un sistema integral de apoyo industrial, una abundante fuerza laboral y talento, y diversos escenarios de aplicación, dijo Jason Ding, añadiendo que estas ventajas únicas no sólo podrían satisfacer la demanda interna sino también mejorar la oferta en el mercado internacional.
Por ejemplo, el cultivo por parte del país de nuevos motores de crecimiento a gran escala en sectores como infraestructura verde, energía verde, transporte verde y estilo de vida verde generará mercados de inversión y consumo con un tamaño estimado de 10 billones de yuanes (alrededor de 1,4 billones de dólares estadounidenses) anuales, lo que promete un potencial enorme.
Haciendo hincapié en la naturaleza fundamentalmente global de estas nuevas tecnologías, Keyu Jin, profesor de la Escuela de Economía y Ciencias Políticas de Londres, dijo: «China podría estar liderando el camino en vehículos eléctricos, baterías y paneles solares, pero todos ellos están integrados en un suministro global cadena. Va a involucrar a todos».
A diferencia de algunos países que recurren a acciones regresivas como el desacoplamiento, la interrupción de las cadenas de suministro y la construcción de barreras, China ha reafirmado su compromiso de abrir más sus puertas al mundo y profundizar la cooperación con las comunidades internacionales.
En su discurso, el primer ministro Li Qiang pidió a todos los países y regiones trabajar para profundizar los intercambios y la cooperación científica y tecnológica, reforzar las bases para el desarrollo verde, salvaguardar un entorno de mercado abierto y promover el desarrollo inclusivo y mutuamente beneficioso.
China sigue firme en su compromiso con la apertura. Se ha comprometido a aumentar las importaciones de bienes y servicios de alta calidad de todo el mundo, atraer una mayor inversión extranjera en sectores como la manufactura de gama media y alta y los productos biofarmacéuticos, optimizar aún más el acceso a los mercados y fomentar un negocio abierto, inclusivo y transparente. entorno para las empresas de todo el mundo.
«Definitivamente necesitamos mantener a China abierta al mundo, pero también necesitamos mantener el mundo abierto a China», agregó Jin.
