Río de Janeiro, 23 jun (Xinhua) — «El desarrollo del fútbol de un país requiere una ecología futbolística saludable, que incluye un sólido sistema de entrenamiento juvenil, leyes estrictas para castigar la corrupción en el fútbol y el entusiasmo de la gente por este deporte», dijo en entrevista con Xinhua el entrenador brasileño Maurício Copertino.
Copertino dijo que «como he trabajado en China durante mucho tiempo, tengo profundos sentimientos por China y me gusta mucho China. Siempre tengo confianza en que el fútbol chino puede desarrollarse bien, pero los resultados no se verán de la noche a la mañana, todas las partes necesitan trabajar unidas para crear un buen ambiente ecológico para el fútbol».
Copertino llegó a China en 2003. Militó en el equipo Henan Jianye del que fue capitán. Después de dejar China, se retiró y pasó a ser entrenador. Ha entrenado a muchos clubes brasileños y se desempeñó como entrenador asistente del equipo olímpico brasileño en 2013. Regresó a China en 2015 como asistente de Vanderley Luxemburgo, del equipo Tianjin Quanjian primero, para después ejercer como director técnico del Zhejiang Yiteng por dos veces.
Copertino recordó que hay muchas estrellas internacionales en clubes de la Superliga china. «La incorporación de un gran número de jugadores internacionales ha mejorado la calidad de la liga china y algunos clubes han conquistado buenos resultados en competiciones como la Copa Asiática», explició.
«Sin embargo, los fondos invertidos se concentraron en grandes nombres con precios altísimos, lo cual solo puede generar una prosperidad superficial a corto plazo», dijo, y agregó que «la inversión de China en la formación juvenil es muy insuficiente y no existe una buena conexión entre los equipos de base y equipos principales».
Copertino ha entrenado a múltiples equipos de fútbol base en Brasil, incluidas las selecciones nacionales Sub-15, Sub-17, Sub-20, Sub-23 y varios clubes.
Precisó que en Brasil, tanto a nivel de club como la selección, tienen un mecanismo muy completo para los equipos base. Los clubes también poseen entrenadores completos en equipos de base, por ejemplo técnicos físicos, técnicos para tácticas o para porteros.
Un ecosistema futbolístico saludable debe incluir el castigo a la corrupción. Copertino cree que la corrupción en el fútbol existe en países de todo el mundo, incluido Brasil, pero cómo minimizar la corrupción requiere una legislación especial que la garantice.
En diciembre del año pasado, el Congreso brasileño aprobó un proyecto de ley sobre apuestas deportivas en línea, que entró oficialmente en vigor tras ser firmado por el presidente Lula. A finales de enero del año, el Gobierno federal creó la Secretaría de Apuestas Deportivas y Deportes Electrónicos, responsable de regular y supervisar concretamente la industria de las apuestas deportivas y los juegos en línea.
El técnico brasileño afirmó que, en los últimos dos años, cerca de 200 jugadores de la liga nacional de Brasil han sido sancionados por «amaño de partidos», además de ser suspendidos. También deben pagar multas y, en casos graves, pueden ser encarcelados.
Por supuesto, el ambiente futbolístico también debe ser creado por la gente. Como «reino del fútbol», reconocido por todo el mundo, el ambiente futbolístico de Brasil no tiene parangón. No es necesario que el Gobierno promueva vigorosamente el fútbol universitario. Los niños juegan y ven partidos de fútbol en cualquier momento. Es esta pasión por el fútbol la que permite que siempre surjan nuevas generaciones de jugadores en Brasil.
«De hecho, el entusiasmo de los aficionados chinos no es nada débil. Cuando trabajaba en China, podía sentir el entusiasmo de los hinchas. Aunque en los últimos dos años el fútbol chino ha sufrido problemas financieros, debido a problemas de los patrocinadores de los clubes, la actitud del Gobierno hacia el apoyo al fútbol siempre ha sido firme», indicó.
«Creo que el fútbol chino podrá lograr grandes avances, pero debemos recordar que el entorno ecológico del fútbol no se puede crear en uno o dos años. Y los resultados, naturalmente, no se pueden lograr tan rápido», reiteró.
«Además, mientras China desarrolla el fútbol, en otros países el fútbol también se desarrolla y progresa. Y el nivel general del fútbol mundial evoluciona constantemente, por lo que el fútbol chino no puede parar de esforzarse en momentos de dificultad», finalizó Copertino.
