La Paz, 14 jun (Xinhua) — En medio de una creciente ola de protestas de sectores sociales, el presidente de Bolivia, Luis Arce, admitió hoy viernes que su Gobierno enfrenta problemas, pero tampoco le «acobardan».
Durante un acto de entrega de obras en el municipio de Apolo, departamento de La Paz (oeste), el mandatario destacó los logros de su administración en campos como la educación, la salud y el desarrollo económico, pilares que, según él, están transformando la calidad de vida de los bolivianos.
«Hemos sacado al país adelante en salud y en economía. Ahora enfrentamos problemas, pero no nos acobardan. Más bien, nos potencia porque el pueblo aquí unido nos da fuerza para seguir trabajando y seguir construyendo nuestro país», subrayó.
Diversas organizaciones planifican protestas para la próxima semana, incluido el gremio de transporte pesado de carga internacional que el lunes irá a huelga indefinida con bloqueos de carreteras y cierre de fronteras, mientras que los gremiales han convocado a manifestaciones en distintas regiones del país.
Por su parte, el Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade), alineado a la derecha opositora, planea renovar sus protestas en demanda de atención a varios pliegos petitorios y en protesta por la escasez de dólares y el suministro irregular de combustibles.
Los trabajadores de la Caja Nacional de Salud (CNS) y médicos también anunciaron un paro de 96 horas (cuatro días) a partir del próximo lunes para exigir la destitución de su gerente, Uzziel Boris Claure.
En su discurso, Arce resaltó el modelo económico que impulsa el Gobierno, y aseguró que «está más vigente que nunca» para enfrentar el contexto internacional adverso, la contracción económica mundial, los efectos del cambio climático y los constantes conflictos sociales en el país.
