San José, 7 jun (EP/PL).- Costa Rica enfrenta hoy una fuerte actividad telúrica en la noroccidental región Tilarán de Guanacaste, que causó unos 200 sismos desde el 27 de mayo hasta la actualidad, aseguran expertos y autoridades locales.
Las magnitudes de los movimientos de ese tipo, el más fuerte de los cuales fue este miércoles, van entre 2,1 y 4,9, explicaron miembros de la Comisión Nacional de Emergencias, de la Red Sismológica Nacional y del Observatorio Vulcanológico y Sismológico.
Los entes científicos que monitorean el aumento de la actividad geológica en Tilarán de Guanacaste coincidieron en que los sismos son originados por el sistema de fallas Chiripa, ubicado entre Tierras Morenas, Sabalito, Nuevo Arenal y el flanco sureste del volcán Tenorio.
Según la Red Sismológica Nacional, la falla Chiripa tiene una extensión de 20 kilómetros y un potencial capaz de generar terremotos de magnitud 6,6 en la escala del momento.
El Laboratorio de Ingeniería Sísmica de la Universidad de Costa Rica, por su parte, estima que la falla tiene una longitud de entre 18 y 20 kilómetros y puede originar movimientos de magnitud 6,3 con intensidades de nivel severo a lo largo de la zona de ruptura de la placa tectónica.
La falla Chiripa, una de las cinco que integran el sistema Haciendas-Chiripa, está ubicada al sureste de la localidad de Tilarán, del lado oeste y sur del lago Arenal.
Esa región sísmica, según la literatura geológica nacional, fue la causante del terremoto de Tilarán del 14 de abril 1973 (magnitud 6,5), y los expertos estiman que tiene un periodo de recurrencia para generar otros en la zona de Arenal.
La CNE aseguró que mantendría una vigilancia cercana junto a las instituciones de primera respuesta, como los Comités Comunales de Emergencias de la zona, mediante la información de la Red Sismológica Nacional y del Observatorio Vulcanológico y Sismológico.
